(IN)Material, reflexiones de luz en Llum Bcn 2018

El festival de iluminación Llum Bcn se ha consolidado como el festival de invierno de Barcelona. En la edición del 2018 ha dado un paso importante al trasladarse desde el casco antiguo de la ciudad al distrito tecnológico 22@ del Poblenou y doblar el número de instalaciones y espectáculos. El amplio programa ha alternado reconocidos artistas internacionales y nacionales con jóvenes talentos de las escuelas de diseño y arquitectura de la ciudad.

ntre las numerosas propuestas presentadas destaca la instalación (IN)Material de la Asociación Profesional de Diseñadores de Iluminación (APDI), diseñada por Mariel Fuentes (Ldluz) + Michela Mezzavilla (reMM) en el Disseny Hub Barcelona (DHUB). A partir de la observación del contexto de la Plaza de les Gloríes, como punto de encuentro de diferentes capas de construcción y deconstrucción y conexiones tanto físicas como conceptuales, la instalación propone una reinterpretación de los seis prismas de los lucernarios del Museo del Diseño, como elementos catalizadores de luz.

La pieza reflexiona sobre la luz, como materia intangible, que desvela su presencia y sus características solo interactuando con los materiales y bajo algunas condiciones específicas. Los prismas de los seis lucernarios inspiran el diseño de seis estructuras de sutiles hilos translucidos que juegan a descomponer su misma geometría generando nuevas composiciones dinámicas y envolventes. Las seis estructuras, emplazadas finalmente en la Sala A del Museo del Diseño, se van materializando y desmaterializando según la progresión del punto de vista del observador y según la presencia o la ausencia de la luz artificial. Las finas líneas van trazando los límites de unos planos imaginarios, que crean múltiples capas superpuestas entre sí, generando efectos ópticos de dinamismo visual. Por otro lado, la iluminación, oculta en las estructuras de soporte de los telares, genera una capa de lectura del espacio añadida, otorgando materialidad, color y dinamismo a unos elementos por lo demás translucidos, etéreos y casi invisibles. El visitante tiene la opción de observar el conjunto desde lejos, para apreciar la interrelación de las formas y de los dinamismos de luz, o de meterse dentro de cada una de las estructuras, para una experiencia más personal e inmersiva.

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